La palabra “Hernia” se refiere a cuando una parte del contenido de la cavidad abdominal (grasa, intestinos, vejiga, apéndice, etc.) se sale a través de un orifico, y queda cubierta solo por la piel. En el caso de la Hernia Abdominal Incisional, el orificio es el sitio de la cicatriz donde se realizó una cirugía abdominal.
Hay muchas causas, las principales son debido a una mala cicatrización de la herida de una cirugía, infección de la herida, pacientes desnutridos, una mala técnica del cirujano para cerrar las heridas, entre otras.
La hernia incisional produce una “bola” en el sitio de la cicatriz de una cirugía antigua que aumenta con los esfuerzos y que disminuye con el reposo. Con forme pasa al tiempo, la hernia se hace más y más grande. La mayoría de los pacientes no sufren dolor a menos de que haya alguna complicación.
Se pueden presentar las complicaciones comunes a todas las hernias:
- Que un intestino se quede atrapado en la hernia y no pueda regresarse a su sitio normal, y
- Que el intestino se doble dentro de la hernia y no permita el paso de los alimentos (obstrucción intestinal).
Si estas situaciones no se resuelven de forma urgente el intestino se gangrena y se revienta.
El diagnóstico se realiza con la exploración física. En casos de hernias grandes o múltiples, es necesario solicitar una tomografía abdominal para establecer un plan de tratamiento.
Es necesaria una cirugía para regresar todos los órganos a su lugar y colocar una malla para tapar el orificio de la hernia y así evitar que se vuelvan a salir. Hay muchos tipos de mallas; su médico le indicará cual es la más adecuada para su caso en particular y le explicará si se tiene que realizar algún procedimiento adicional, pues entre más grande sea la hernia es más complejo el tratamiento.
Ninguna. La cirugía es el único tratamiento disponible. Hay algunos casos muy graves en los que no se puede operar.
Si. Es posible aprovechar para realizar una cirugía estética (abdominoplastía) después de reparar la hernia y así mejorar el aspecto estético del abdomen; para hacerlo se requiere el apoyo de un cirujano plástico antes y durante la cirugía para establecer un plan y expectativas reales.
Dependiendo del caso, el paciente puede ir a su casa unas horas después de la cirugía o permanecer internado en el hospital por uno o más días. La dieta se inicia de acuerdo a la evolución del paciente, aunque frecuentemente es al día siguiente. Se indican analgésicos para controlar el dolor que ocasiona la cirugía. En ocasiones es necesario dejar drenajes para evitar acumulación de líquido. Los puntos se retiran en una o dos semanas.
La hernia crecerá cada vez más, a veces alcanzando tamaños realmente gigantes y, por tanto, haciendo más difícil su reparación.
